En la vida, se puede optar por tener una actitud amorosa que permite que realicemos pequeños actos que, como consecuencia de ellos, generan cambios gigantescos que cada ser humano necesita para ser feliz verdaderamente.
Hay una serie de pequeñas actitudes
que nos permiten ser más humanos cada día:
- Multiplica las bendiciones agradeciendo todo lo que la vida te ofrece cada día,
desde lo más mínimo hasta lo grandioso, porque la gratitud es la gran
multiplicadora de cosas buenas y perfectas.
- Desarrolla tu ojo interior y ve que los
acontecimientos de tu vida se desarrollan bajo la justicia divina y siempre
pero siempre bajo la bondad y misericordia de Dios Padre, permitiendo así
que tu Ser interno te muestre lo que debes trabajar y sublimar, sin catalogar ni etiquetar cada
situación con prejuicios.
- Respira sutilmente y siempre con amor, que tu
respiración sea siempre una caricia para ti. Respirar es algo poderoso que
permite vivir, desde otra perspectiva la respiración consciente es la vía
directa para sentir, para conectarse con en el instante presente, con el reino de
los cielos que está dentro de nosotros. Practica la respiración exhalando lo
impuro e inhalando lo puro.
- Celebra cada momento, esta es la esencia de
vivir con amor a la vida y de este estado del Ser, la energía divina fluirá a
través de ti y así se desarrollará una comunicación interna con tu propia luz,
con tu paz, con tu sistema interno de dirección. Tu ser sabe que todo lo que no es
alimentado e inspirado y creado con amor se disuelve, porque no habrá creación
divina, reflexiona sobre esto.
- Pide todo lo que necesites no importa cuán grande sea y
luego actúa en pos del servicio como Dios quiere que lo hagas.
- Las cosas cambian rápidamente con la presencia
pura que nace y surge desde lo más profundo. Escucha lo que la vida te está
diciendo sutilmente y sin palabras, cuando la superficie se ve espeluznante enfócate siempre en la belleza, cuando el cambio está golpeando, solo respira.
Cuando todo el mundo está hablando, cuando hay un ruido estrepitoso, sigue tu
camino, así mismo, cuando el miedo intenta
detenerte, enfréntalo y observa lo que sucede. Cuando otro te lastima,
sigue irradiando solo amor.
- Cuando un ser se ha olvidado quien Es
realmente, recuérdaselo con tu ejemplo. Ponte a utilizar tus cinco sentidos con
el firme propósito de unir todas tus partes: Di YO SOY el AMOR que brilla como
el sol que se dirige a todas las direcciones, que ilumina con gran intensidad,
sin juicio.
- El Amor y la luz es una profunda necesidad de
Ser uno con el todo, una profunda necesidad de disolver en una unidad el tú y
el yo. Tu corazón es el instrumento musical que contiene una música grandiosa,
la bella música del Amor. Sin embargo, no ha sonado, pero está allí,
esperando el momento para ser sentido por el mundo y danzado en la vida. Si aún
no has conocido qué música ha estado llevando tu corazón es porque has estado
separado de tu propia fuente, de tu Origen.
Es sólo a través del amor que ofreces y das,
que la dulce música del corazón comienza a oírse. Sé un canal de Amor para que
quien mire tus ojos vea el brillo de un nuevo amanecer, una esperanza. Que quien
tome tus manos sienta a la humanidad entera contenida en ellas.
Que tus
palabras sea el agua fresca para aquellos que
estén sedientos de conocer la Verdad Universal. Que a través de tus
abrazos sientan el calor y se disuelva la frialdad que llevan dentro de si. Que
tu sonrisa eleve tu mundo circundante más allá de las estrellas. Que tu corazón
les muestre el camino hacia la luz.
- Cuando dudes, el amor es la respuesta, el secreto, el elixir de la vida, la clave de la unificación interna, la causa y el efecto, de todo lo anhelado en tu paso por la tierra.
Fuente: Revista Vida Consciente
No hay comentarios:
Publicar un comentario